El agua no potable es aquella que no es segura para el consumo humano. Esto se debe a que contiene sustancias nocivas para la salud como microorganismos, metales pesados, sustancias químicas, pesticidas y nitratos. Estas sustancias pueden causar enfermedades, deshidratación e incluso la muerte.
El consumo de agua no potable puede causar enfermedades graves como diarrea, cólera, salmonelosis, fiebre tifoidea, infecciones respiratorias, infecciones del oído, hepatitis A, enfermedades parasitarias y hasta cáncer. Estas enfermedades pueden tener consecuencias graves, incluso la muerte.
Además, el consumo de agua no potable puede provocar deshidratación, especialmente en los niños, aumento de peso debido al exceso de calorías, malnutrición, fatiga crónica, desequilibrio hormonal, daños en el sistema inmunológico y una mayor susceptibilidad a enfermedades.
Lo primero que hay que hacer para saber si el agua que bebemos es potable es conocer su origen. Si el agua proviene de una fuente natural, como un manantial, río, lago o arroyo, es probable que contenga microorganismos que pueden ser dañinos para la salud.
Si el agua proviene de una fuente artificial, como un pozo o un embalse, hay que asegurarse de que está tratada para eliminar los contaminantes. La mejor forma de hacer esto es pedirle al proveedor de agua un informe de calidad del agua. Si el informe muestra que el agua no está tratada, hay que hacer todo lo posible para evitar beberla.
Si has bebido agua no potable, lo primero que hay que hacer es identificar los síntomas. Si presentas alguna enfermedad relacionada con el consumo de agua no potable, como diarrea, fiebre, vómitos, dolor abdominal, dolor de cabeza o malestar general, hay que acudir inmediatamente al médico y decirle que has bebido agua no potable. El médico recetará un tratamiento adecuado para tratar los síntomas.
Además, hay que evitar beber agua no potable en el futuro. Si el suministro de agua no está tratado, se puede hervir durante cinco minutos antes de beberla para eliminar los contaminantes. También es recomendable usar filtros de agua de calidad para reducir la cantidad de microorganismos y contaminantes.
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¿Cuáles son los riesgos de beber agua en mal estado?
El agua es un elemento básico para la vida y su calidad es fundamental para mantener nuestra salud. Beber agua en mal estado puede generar varios problemas de salud, por eso es importante conocer los riesgos que implica.
Enfermedades
Las enfermedades que pueden provocar beber agua en mal estado son múltiples. Una de las más comunes es la diarrea, que puede ser causada por el consumo de agua contaminada con gérmenes como bacterias o virus. Esta enfermedad puede ser muy peligrosa si no se trata a tiempo.
Parasitos
El agua contaminada con sustancias químicas también puede ser causa de enfermedades como el giardiasis, que es el resultado de una infección por parásitos. Esta enfermedad se transmite a través del agua y puede provocar dolores abdominales, diarrea, vómitos y dolores de cabeza.
Contaminación química
Por último, el agua contaminada con productos químicos como plaguicidas, pesticidas y metales pesados puede causar enfermedades graves como cáncer y problemas en el sistema nervioso. Estos productos químicos pueden estar presentes en el agua aunque no se vean a simple vista.
¿Cuáles son los riesgos de beber agua directamente del grifo?
El agua del grifo es una fuente común de hidratación. Sin embargo, existen algunos riesgos potenciales asociados a su uso. Estos riesgos varían según la ubicación geográfica y el tipo de sistema de agua.
Contaminantes
Los contaminantes en el agua del grifo pueden ser un riesgo para la salud. Estos contaminantes pueden ser químicos, biológicos o físicos. Algunos ejemplos comunes son productos químicos industriales, pesticidas, microorganismos, sedimentos o metales pesados. Estos contaminantes pueden entrar en el agua de la llave a través de la tierra o del alcantarillado.
Infecciones
Las infecciones bacterianas y virales pueden propagarse a través del agua del grifo. Estos organismos patógenos pueden afectar al sistema respiratorio, digestivo o incluso al sistema nervioso central. Si una persona tiene un sistema inmune comprometido, estos organismos pueden ser particularmente peligrosos.
Contaminantes radiactivos
En algunas áreas, el agua del grifo puede contener cantidades peligrosas de contaminantes radiactivos. Esto puede ocurrir cuando el agua está expuesta a la radiación natural proveniente del suelo. Estos contaminantes pueden ser particularmente dañinos para la salud si se beben durante periodos prolongados de tiempo.
Contaminación por plomo
La contaminación por plomo en el agua del grifo es un riesgo para la salud. Esto se debe a que el plomo puede filtrarse en el agua a través de los sistemas de abastecimiento de agua. El plomo puede ser particularmente dañino para los niños, ya que puede afectar el desarrollo del cerebro y el sistema nervioso.